Lectura
Hola, ¿qué tal? Hoy regreso con el libro que habíamos dejado pendiente anteriormente, ya sabes, "Está bien no estar bien". Pero esta vez lo abordaremos con un enfoque distinto.
Hasta ahora hemos hecho pequeños resúmenes o explicaciones sobre él, y tal vez ya hayas olvidado gran parte del contenido. Por eso, hoy empezaremos a retomarlo de otra manera: en esta entrada explicaré la primera parte del libro, y las siguientes partes las desarrollaremos en futuras publicaciones.
PARTE I: LA TESTARUDEZ DE LA MENTE Y LA RESISTENCIA AL CAMBIO
1. La mente humana como obstáculo: La mente no es pasiva ni objetiva. Es un sistema complejo, egocéntrico, emocional y muy terco. Tiene una tendencia natural a conservar lo conocido, incluso si es negativo o dañino.
Riso compara esta rigidez mental con vivir en una piscina de excremento hasta el cuello: nos molesta, pero preferimos no movernos para no levantar olas. La mente se protege a sí misma, se autoengaña, crea creencias que luego defiende como verdades absolutas, y esto bloquea el cambio y el bienestar.
2. Resistencia al cambio y miedo a lo nuevo: Cambiar es incómodo porque implica desestructurar lo que ya conocemos. La mente tiene miedo a salir de la zona de confort. Cambiar implica “matar” viejas ideas, dejar atrás costumbres y reorganizar la percepción del mundo. Hay dos formas de romper con lo negativo:
- Lenta: desapegarse poco a poco.
- Rápida: lanzarse y aceptar lo peor que podría pasar.
3. Economía cognitiva: La mente ahorra energía evitando cuestionarse a sí misma. Cuando algo contradice nuestras creencias, preferimos adaptar la realidad a nuestras ideas antes que cuestionarlas. Riso presenta los sesgos cognitivos, mecanismos que distorsionan nuestra visión del mundo:
a) Sesgos atencionales: Vemos lo que encaja con nuestras creencias. Ej.: si creo que soy incapaz, sólo notaré mis fracasos.
b) Sesgos de memoria: Recordamos más fácilmente lo negativo si tenemos esquemas negativos. El estado de ánimo afecta nuestros recuerdos. La tristeza genera recuerdos tristes, la ansiedad nos hace recordar más amenazas.
c) Sesgos perceptivos: Interpretamos la realidad de forma errónea. Los prejuicios, la rigidez mental y las emociones negativas alteran cómo vemos el mundo.
4. Profecías autorrealizadas: Es cuando creamos inconscientemente una realidad que confirma nuestros miedos o creencias negativas. Ej.: Si pienso que nadie me quiere, actúo distante y al final las personas se alejan, confirmando mi idea. Se convierte en un ciclo: lo que creemos, lo provocamos, y luego lo usamos como “prueba”.
5. Estrategias evitativas y compensatorias: Para evitar el sufrimiento, desarrollamos conductas que impiden que enfrentemos nuestros miedos.
- Evitativas: evito situaciones que activarían mis miedos (soledad, fracaso, crítica).
- Compensatorias: exagero lo contrario para ocultar mis debilidades. Ej.: el que se cree inferior se vuelve arrogante; el que teme no ser inteligente se vuelve adicto al estudio.

Comentarios
Publicar un comentario